Todos queremos tener un blog que consiga retener a las personas que nos visitan por primera vez. Un sitio que engancha es aquel que tiene lectores que se quedan, que visitan muchas páginas una vez han encontrado nuestro sitio para ver qué tenemos que decir. Como consecuencia, estos blogs suelen tener un porcentaje de rebotes bajo. Esta métrica es muy útil para conocer el estado de salud de nuestro blog. Evidentemente no es la única, pero ayuda a saber de forma indirecta qué piensan de nosotros nuestros visitantes.
Lo que es realmente importante es conseguir que vuelvan cada vez que escribimos y publicamos una entrada, ya sea a través de feeds RSS o de alertas por email. Por otro lado, construir una lista de suscriptores y lectores es un punto muy importante de nuestra actividad de marketing. Si puede conseguir una lista de seguidores leales interesados en lo que usted tiene que decir y que quieran dedicar su tiempo a leer sus artículos y, posiblemente, dejar un comentario con su visión propia del tema, será estupendo. Si es así, habrá conseguido realmente tener un sitio que enganche.
Pero ¿cómo conseguirlo en la práctica?
Hay una serie de elementos clave en los que debe centrarse si quiere que la gente lea sus escritos. El más importante de ellos es el contenido que escriba. El estilo y el grado de concentración en el tema que toque dependerán, lógicamente, del nicho de mercado al que va dirigido, pero una cosa debe permanecer constante. Esa cosa es la calidad de lo que produce. Si la calidad de su producción comienza a decaer, sus lectores lo notarán y la cantidad de seguidores que tenía también empezará a disminuir.
Un tema importante, controvertido en cierto modo, es el de la frecuencia de sus publicaciones en el blog. Estamos viendo blogs muy importantes en nichos extremadamente competitivos que no publican entradas cada día. Si sus entradas son de gran calidad, algunos opinan que no es estrictamente necesario mantener la tensión que conlleva tener que publicar artículos (uno o más al día) de forma constante. Incluso hay quien dice que publicar ‘demasiado’ puede ser perjudicial porque el lector se encuentra con un exceso de información, no sabe qué elegir y decide marcharse. En mi opinión esto no creo que ocurra en muchas ocasiones. Por contra, cada vez que publicamos un artículo de calidad en nuestro blog, es como hacer una inversión económica: es una fuente más de tráfico a nuestro blog.
Tenga en cuenta que publicar un artículo a la semana, de gran calidad y contenido único, que sea realmente importante para sus lectores, puede ser más que suficiente para mantener el flujo de lectores y su interés. Es su elección qué modelo de gestión del blog quiere seguir.
Ahora que hemos comentado qué tipo de entradas debe producir, vamos a hablar de cómo conseguir que los lectores vuelvan. Para conseguir esto tenemos a nuestra disposición una serie de herramientas. La más obvia de ellas es a través de los RSS feeds. Si esta es su elección y quiere que la gente se sucriba, ponga el feed en una posición destacada dentro del blog. Hay blogueros que ponen el link al principio o al final de todas las entradas. La efectividad de las diferentes posiciones de ese enlace debemos probarla para saber cuál va mejor a nuestros lectores. Ponerlo al final del artículo tiene la ventaja de que si el artículo ha gustado tenemos más oportunidades de que se suscriban a nuestra feed RSS.
Mientras la feed RSS es la forma más fácil de conseguir que los lectores se suscriban, conseguir que esos mismos lectores se suscriban a nuestra lista de correo es bastante más difícil. A pesar de esa dificultad, todos sabemos la improtancia que tiene construir una lista para nuestro negocio online. Si puede construir una lista grande y dirigida, tendrá una posesión tremendamente valiosa. Creo que conseguir esto, va a depender también de la calidad de su contenido. Si el lector puede ver que está ofreciendo valor real y que merece la pena suscribirse a su lista a cambio de toda esa información gratis, lo hará.
Hay muchas otras formas de conseguir que la gente retorne a su blog con frecuencia, como el posting en medios sociales como Twitter o Facebook. Tómese el tiempo necesario para averiguar qué método es el que va mejor para su blog. Sea cual sea el método que elija, haga que sea lo más sencillo posible para su lector.